Que Fuel Fandango era un grupo que de debía tener muy en cuenta no era un secreto. Que fueron uno de los grupos más aclamados y vitoreados del Low Cost Festival tampoco. Que su cantante tiene una voz fuera de lo normal tampoco. Pero lo que pocos esperaban es esta vuelta de tuerca que juega con el rythm and blues, la fusión flamenca, el pop y el country con una soltura demoledora. Es uno de esos discos, pocos, que en la primera escucha ya te atrapan y que prometen desarrollarse a largo plazo. Creo que no sentí esto desde el mítico 21 de Adele. Definitivamente, los pelos como escarpias y los ojos como platos mientras me sangran las manos de tanto aplaudir. Imprescindible.