歌词
@migu music@
A mis cuarenta y diez,
Cuarenta y nueve dicen que aparento,
M醩 antes que despu閟,
He de enfrentarme al delicado momento
De empezar a pensar
En recogerme, de sentar la cabeza,
De resignarme a dictar testamento
(perd髇 por la tristeza).
Para que mis allegados, condenados
A un ingrato futuro,
No sufran lo que he sufrido, he decidido
No dejarles ni un duro,
S髄o derechos de amor,
Un siete en el coraz髇 y un mar de dudas,
A condici髇 de que no
Los malvendan, en el rastro, mis viudas.
Y, cuando, a mi Roc韔,
Le escueza el alma y pase la varicela,
Y, un rojo escalofr韔,
Marque la edad del pavo de mi carmela,
Tendr醤 un mal ejemplo, un hulla hop
Y un d'artac醤 que les ladre,
Por cada beso que les regate
El fanfarr髇 de su padre.
Pero sin prisas, que, a las misas
De r閝uiem, nunca fui aficionado,
Que, el traje de madera, que estrenar?
No est?siquiera plantado,
Que, el cura, que ha de darme la extremaunci髇,
No es todav韆 monaguillo,
Que, para ser comercial, a esta canci髇
Le falta un buen estribillo.
Desde que salgo con la p醠ida dama
Ando m醩 muerto que vivo,
Pero dormir el sue駉 eterno en su cama
Me parece excesivo,
Y, eso que nunca he renunciado a buscar,
En unos labios abiertos,
Dicen que hay besos de esos que, te los dan,
Y resucitan a un muerto.
Y, si a mi tumba, os acerc醝s de visita,
El d韆 de mi cumplea駉s,
Y no os atiendo, esper醖me, en la salita,
Hasta que vuelva del ba駉.
緼 qui閚 le puede importar,
Despu閟 de muerto, que uno tenga sus vicios...?
El d韆 del juicio final
Puede que dios sea mi abogado de oficio.
Pero sin prisas, que, a las misas
De r閝uiem, nunca fui aficionado,
Que, el traje de madera, que estrenar?
No est?siquiera plantado,
Que, el cura, que ha de darme la extremaunci髇,
No es todav韆 monaguillo,
Que, para ser comercial, a esta canci髇
Le falta un buen estribillo.
展开